El rey no tiene la culpa
La siempre indeseable nueva convocatoria de elecciones generales por aplicación de la disolución automática prevista en el artículo 99 de la Constitución ha generado (como ya sucedió en 2016) toda una “lista de culpables” a los que las diversas fuentes echan la culpa. Por supuesto, los líderes de los principales partidos políticos cruzan reproches entre ellos. Pero tampoco faltan quienes apuntan a la deficiente regulación del artículo 99 de la Constitución, o incluso al jefe del Estado, por no mediar más activamente o llevar a cabo alguna propuesta alternativa. En cuanto a la redacción del precepto constitucional, es verdad que tiene algún aspecto mejorable, pero en este caso no está ahí la causa de que no se haya logrado la investidura. La propuesta de reformarlo para establecer una especie de proclamación automática del cabeza de la lista con mas votos y escaños, aunque sea la solución ofrecida en la Comunidad de Castilla-La Mancha y en los municipios, choca con la misma esencia del parlamentarismo, sistema en el que todo Gobierno requiere la confianza de la cámara. Más llamativa aun es la posición de quienes imputan al rey una falta de actuación o ausencia de medios para dar solución al problema. Algunas opiniones, y entre ellas la del líder de uno de los partidos más republicanos de todo el arco parlamentario, apuntan que el jefe del Estado debería haber mediado para sacar adelante una propuesta, fórmula o combinación determinada. Seguramente a quien ha opinado de ese modo no le importa lo más mínimo el descrédito o daño en su imagen que tal actitud habría implicado al monarca. No olvidemos que, en el extremo contrario, otros han criticado la afirmación que hizo Felipe VI este verano, en un sentido tan genérico y obvio como que era preferible que hubiera Gobierno antes de ir a nuevas elecciones. En fin, la forma en que Italia (¡una vez más!) ha logrado resolver una crisis de Gobierno sin ir a elecciones, acaso con un cierto papel mediador del jefe del Estado, les puede servir a algunos para pensar que en una República habría mejores salidas a esta situación. Y no es así, en modo alguno.
Para empezar, todas las regulaciones constitucionales dejan siempre aspectos abiertos a la práctica, de manera que la experiencia en el funcionamiento siempre es un aspecto a considerar. Para seguir, ni en Italia, ni en España, ni en ningún sistema parlamentario, se logra formar Gobierno si no hay mayorías absolutas ni acuerdos entre los partidos. Las “soluciones imaginativas” como un presidente más alejado de los concretos partidos, caben en cualquier sistema parlamentario, pero resultan bastante ajenas a nuestra experiencia. Añadido a lo anterior, el monarca parlamentario debe limitarse a “ser consultado, animar y advertir” y una actitud más protagonista nunca será positiva. Y en fin, no olvidemos que la propuesta de candidato a presidente viene refrendada por el presidente del Congreso, quien asume la responsabilidad por ella. Así que si alguien debe adoptar una actitud más implicada en la búsqueda de soluciones, sería en este caso la presidente del Congreso. Aunque es claro que para ello debería ser una persona con un perfil realmente neutral. El papel del rey, aparte de su importante función simbólica que da un gran realce a todo el proceso, se limita a mi juicio a cuestiones de cierto detalle sobre todo el proceso previo, en particular el modo y procedimiento de las consultas, a su eventual repetición, y aun en esa función actuará en estrecha comunicación con la presidencia del Congreso. Precisamente en ese aspecto, en el que los precedentes no planteaban ninguna complejidad, Felipe VI ha afrontado en 2016 y ahora en 2019 situaciones novedosas, desde el rechazo de una propuesta hasta la conveniencia o no de nuevas consultas si la primera propuesta fracasa, antes de proponer (o no) al mismo u otro candidato. Y todas ellas las ha resuelto de forma impecable, estableciendo un razonable criterio que sin duda se tendrá en cuenta en el futuro.
Fuente de la imagen: https://www.elindependiente.com/politica/2019/05/22/rey-se-reune-batet-aun-no-fijara-consultas-investidura/